Su posición crítica al Gobierno iraní le llevó a exiliarse. Sin embargo, ello no le ha impedido a Shirin Ebadi, ganadora del premio Nobel de la Paz, seguir su activismo en pro de los derechos humanos, la participación de la mujer y la democracia en su país. 40 años después de haber triunfado la Revolución en su país, Ebadi señala que la libertad que se reclamaba en 1979 no ha sido conquistada.